Toñito apareció inesperadamente en mi Facebook comenzando este verano ya ido, un viernes si mal no recuerdo, luciendo una expresión tan saludable en su foto de perfil -pleno y radiante de felicidad con una camisa exageradamente blanca y sugerido por Sandrita, una amiga muy querida a quien se le pegaban esos sujetos a los que técnicamente podríamos llamar “zonzos”.
En mi concepto su cara era un libro de autoayuda pero podría ser un prejuicio mío aunque luego Sandrita lo disolvió aclarándome: “Toñito es lindo-lindo,” me dijo “parece que viviera filmando una propaganda de leche Gloria”. Nunca abrí su perfil (ni esperé que abriese el mío) hasta hace unos días que Facebook envió un reporte que me causó gracia: Toñito: ya no habla portugués.
Fue tanta mi curiosidad que se convirtió pronto en una obsesión ¿cómo michi podría alguien dejar de hablar un idioma de la noche a la mañana? Intrigado, invertí muchas horas y días en estudiar la vida de Toñito: observé sus fotos, leí sus comentarios, ví sus videos, y es así que ahora tengo una idea de lo que le pasó a este contacto a quien sin conocer personalmente siento ahora muy cercano.
El resultado de mi investigación según lo visto es que efectivamente hasta hace unos meses Toñito estaba segurísimo de que hablaba portugués así nomás sin clases ni academia digamos que “por instinto” como lo consignaba su perfil (¡ah! italiano también ahora que recuerdo) sin haberlo estudiado nunca, por pura intuición ….hasta que fue a Brasil y se enteró que no sabía un carajo.
Desde hacía cuatro meses (o sea un mes antes de comprar el pasaje)se hacía llamar “Toninho”. Desde hacía tres, se vió en DVD todas las novelas made in Brazil de Rede Globo que pasaron por el 9 y que pudo encontrar bajo copyright de “el hueco” y los dos últimos meses tomó solo Caipiriña y Brahma con ese resultado catastrófico conocido como “cruce”.
Un mes antes llevó a Sandrita a un recital de Pilar de la Hoz y ni aún con esto quedó advertido a tiempo de la verdadera dificultad del idioma. Sandrita aprovechó la velada para preguntarle a donde iba a llegar. “A la casa de Enzo, un amigo de la universidad”, que según dijo no sabía que hacer con su plata y cuyos papis reservaban una casa en Río todos los febreros para no perderse el carnaval carioca.
“Toñi ¿No has escuchado a Julinho y a Brenda Carvalho como tratan de balbucear el español?” Le preguntó Sandrita. Pero el terco no se preocupó en lo más mínimo. “Tranquiliña Sandriña tudo ta bem!” Pero Sandra estaba segura de que estaba engañado por ese tonto doblaje de las novelas que había visto y por esos falsos sacerdotes criollazos de esas sectas mágicas que fingían “falar brasileiro”.
La misma noche que llegó a “el Galeón” cenó con los papás de Enzo y dos parejas de lo más refinadas. De arranque quiso piropear a la señora diciéndole que era muy bella para ser mamá de Enzo. Pero “bella” suena en portugués como “velha” (o sea “vieja”) y no fue recibido el halago con buena cara. Después de quince minutos se aclaró su verdadera intención pero a la mamá ya se le había cortado la digestión.
En la conversación entre otras cosas confundió a Gal Costa Con Gal Matarazzo “¡claro el transexual!”, dijo. Repitió dieciséis veces que la cachaza era malísima al lado del Pisco y que los brasileros eran genéticamente relajados. Enzo en un paréntesis le dijo al oído que iba a tener que regresarse a Lima de emergencia, que si quería se podía quedarse en el cuarto de la casa en donde estaba hospedado.
“Mis papás se van a Bahía dos días y de ahí a Viña”. Así fue que la tan esperada semana se le pasó de parque en parque viendo Río por la ventana y comiendo sin entender de qué se trataba el plato. Y así en sus pocas fotos - que descargó antes de que le robaran la cámara- salía con una cara de pelotudo, (una con blue jean en la playa) y porsupuesto abandonado hasta por el clon de su sombra.
Parece que al regreso tuvo la mala idea de colgar las fotos igual y sus patas lo vacilaron tanto que pasados cuarentaicinco comentarios su paciencia se acabó y no se pudo abrir más su sitio en la red. precisamente ayer recibí un mensaje suyo inbox que decía Toñito: “Sorry, Este Facebook se encuentra temporalmente en reestructuración”
Hoy que hablé con mi querida Sandra supe que su Toñito lindo tiene un gran espíritu y que lejos de sentirse derrotado por la experiencia veraniega está pensando ahora en viajar a Italia a medio año, a Milán más precisamente, porque la vida es corta y como dice él, el italiano es un idioma que se aprende en cualquier pizzeria. Buon Viaggio!
Barrabás Pentagramado
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jaja divertido !!
ResponderEliminarMauricio es un exito tuve el pacer de que me regalara una copia...es talentosisimo queremos mas!!!!
ResponderEliminarAdalina esa no era copia era el original!!
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